Durante la reciente final de la Super Bowl en Nueva Orleans, Taylor Swift fue objeto de abucheos por parte del público mientras apoyaba a su pareja, Travis Kelce, jugador de los Kansas City Chiefs.
La inesperada reacción del público sorprendió a la cantante, quien ha sido una figura influyente en la música pop durante más de una década. Los abucheos han sido atribuidos a seguidores del expresidente Donald Trump, en represalia por el apoyo público de Swift a Kamala Harris en las elecciones presidenciales. Trump se jactó de los abucheos en sus redes sociales, afirmando: “MAGA no perdona”. La reacción de Swift se viralizó rápidamente, eclipsando incluso la actuación del medio tiempo de Kendrick Lamar. Entre los asistentes al evento también se encontraban celebridades como Serena Williams, Bradley Cooper y Kevin Costner.