A dos años del fallecimiento de Julián Figueroa, la controversia legal entre su madre, Maribel Guardia, y su viuda, Imelda Tuñón, ha tomado un nuevo rumbo. Ambas mujeres fueron citadas a declarar en el Juzgado Noveno de lo Familiar, en Cuernavaca, para tratar la validez del testamento dejado por el cantante. Aunque se encontraban en el mismo sitio, no cruzaron palabra alguna durante la jornada judicial.
Según explicó Marco Chacón, esposo y abogado de Maribel, la audiencia tuvo como objetivo principal escuchar las declaraciones de ambas partes de manera individual. El proceso responde a una impugnación promovida por Imelda, quien anteriormente había declarado no tener interés en la herencia, pero que ahora cuestiona la legitimidad del testamento presentado, fechado en 2018.
Guardia fue enfática al aclarar que su prioridad es el bienestar de su nieto, José Julián, señalado como heredero universal en el documento. Aunque se ha especulado sobre una posible falsificación, la actriz reiteró que no tiene ningún interés personal en la herencia y que solo busca claridad para proteger los derechos del menor.